martes, 10 de febrero de 2015

El abrazo partido

No va a saber acariciarte.
Esfuerzo perimido de sus manos.
No se va a enredar en tu saliva,
tu risa tonta, borracha de cielo.
Hipérbole sacrílega y revolucionaria
tu sonrisa de orgasmo.
No va a escuchar con la imaginación
en el poder a los barcos,
o los indios
o cualquier cuento siempre sin moraleja
ni punto final.
No te va a abrazar después del amor
como si la última lluvia de aire del mundo
jugase al gallito ciego en tu beso
y tu suspiro,
vital arrullo de un sueño prohibido
entre abrazos que se duermen
y se tropiezan torpes
y se tocan todo el tiempo
porque lo irreal está ahí.
En el río de tu mano
y esa electricidad que no tienen sus dedos.
No.
No la tienen.
Vos y yo sabemos que no.
Cómo desandaras hoy
tu paisaje sin colores.

No hay comentarios: